Ejercita tu lóbulo frontal
Quién no quisiera un lóbulo frontal en excelente forma, suena abstracto pero existen ejercicios para entrenarlo y no son tan difíciles.
La concentración se puede entrenar, por ejemplo al meditar.
Una forma sencilla que solo toma 10 minutos y que puede integrarse en un día cotidiano es usando la alarma de tu celular y durante cinco
minutos intentar desconectarse de todo lo que hay en el mundo exterior,
cerrar los ojos y limitarse a ver lo que pasa en el cuerpo.
Sentir los latidos del corazón y el sonido de la respiración, cómo están tus músculos, puedes sentir tus piernas, tus pantorrillas están tensas o no, cuando suene la alarma del celular apagala y abre los ojos, ahora realiza lo opuesto durante 5 minutos, observa lo que sucede a tu alrededor pero intenta apartar todos los pensamientos que te distraen, esta es una buena forma de fomentar la concentración.
Al practicar la autodisciplina de meditar favoreces la capacidad para concentrarte y eliminas las distracciones externas, además, leer más es otra forma de fortalecer la concentración e inteligencia.