No es ningún secreto que el ejercicios es muy importante para el bienestar de nuestro cuerpo.
El ejercicios ayuda a mantener nuestro sistema inmune sano, aumenta el flujo sanguíneo, mejora el tono muscular y ayuda a mantener activo nuestro metabolismo.
Sin embargo, al pensar en el ejercicio, normalmente se piensa en cosas como correr o ir a un gimnasio. Aunque estas actividades son benéficas para el estado físico de las personas el tema que nos interesa son los ejercicios físicos que ayudan a nuestro cerebro a mejorar su funcionamiento, y de eso vamos a platicar en este artículo.
La relación entre el ejercicio y el cerebro.
Al igual que el ejercicio ayuda a nuestro cuerpo a desarrollar músculos saludables, también ayuda a nuestro cerebro a desarrollar sus funciones cognitivas. Lo hace de las siguientes formas.
· El ejercicio mejora el flujo de sangre al cerebro que es fundamental ya que perite que el cerebro reciba suficiente oxigeno.
· El ejercicio libera las hormonas necesarias para el crecimiento y correcto desarrollo de nuestro cerebro.
· Al realizar ejercicios se mejora la neuroplasticidad, una capacidad indispensable para el desarrollo de la memoria a largo plazo, la capacidad de razonamiento y la concentración. Esto se logra al promover la generación de nuevas conexiones neuronales.
Qué ejercicios son mejores para el cerebro.
Como regla general, cualquier tipo de ejercicios que sea bueno para tu corazón, es bueno para tu cerebro, Aumentar tu ritmo cardiaco mejora tu circulación, y a su vez, mejora el flujo de sangre hacia el cerebro. Aún así, diferentes tipos de ejercicios tienen distintos efectos sobre el cerebro.
· El ejercicios cardiovascular es excelente, especialmente para las personas que no tienen mucho tiempo, son una excelente manera de hacer que tu corazón bombee sangre rápidamente al cerebro brindando beneficios casi inmediatos, estos ejercicios incluyen el uso de bicicletas fijas o caminadoras.
· Nadar es un excelente ejercicio para el cerebro ya que ayuda a mantener un ritmo contante de actividad física sin esforzar demasiado al corazón, ayuda a oxigenar el cerebro sin llegar a un punto de fatiga
Lo más adecuado es crear un equilibrio entre ejercicio rápido y lento, combinándolos durante la semana.
